El Gobierno de Nicaragua condenó este sábado el agravamiento del conflicto entre Israel y Palestina, denunció la ocupación de los territorios palestinos por Tel Aviv y demandó acciones de la comunidad internacional y de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el reinicio de diálogos que conduzcan al reconocer y crear el Estado Palestino.
Mediante un comunicado, el Gobierno del presidente Daniel Ortega expresó su solidaridad con las víctimas y las familias inocentes y subrayó que los enfrentamientos armados agravan "la situación, ya suficientemente violenta, de la región y del mundo".
Aseguró que la situación regional empeora continuamente "frente a la soberbia, la ceguera, incomprensión e inacción de la comunidad internacional y particularmente de las Naciones Unidas".
Además denunció la ocupación de los territorios palestinos y la destrucción de su patrimonio cultural, sus medios materiales, sus modos y medios de vida y los espacios de profesión de fe. Aseguró que todo ello es un agravio en la conciencia del mundo y de la humanidad.
Tras "condenar la barbarie desatada nuevamente entre dos pueblos hermanos", desde el Gobierno nicaragüense se realizó un llamado “al mundo a la reflexión y a la acción respetuosa, de los valores, la cultura y las formas de vida familiar y comunitaria, que han sido por décadas ignoradas, alteradas y dilapidadas por la voracidad imperial, por el egoísmo, la insensatez, insensibilidad, y desprecio, desde el no reconocimiento del Estado Palestino, es decir, del prójimo, como igual”.
Asimismo, se exigió a la comunidad internacional y las Naciones Unidas que se silencien las armas y se reinicien los diálogos indispensables para defender el derecho a la vida y el reconocimiento y la impostergable creación del Estado Palestino.
“Los pueblos palestino e Israelí tienen derecho a vivir seguros y en paz. Debemos respetuosamente contribuir al diálogo que asegure sus derechos y el reconocimiento pleno de sus Estados”, acotó el comunicado.